examen riesgo quirúrgico examen riesgo quirúrgico
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10.01.2023

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cit., p. 283. Entre los comentarios más relevantes: J.C.P. (La Semaine juridique) ed. Pablo Rodríguez, que transcribe extensamente, en el capítulo que destina al lucro cesante, el comentario de Ramón Domínguez A. sobre la pérdida de una oportunidad (Responsabilidad extracontractual, Santiago, Editorial Jurídica de Chile, 2002, p. 292 y s.). 9). Se administran líquidos para mantener la presión arterial normal hasta que se pueda drenar el líquido alrededor del corazón. sobre esta sentencia, el análisis de Eduardo Court, op. Citado por Nicolás Rojas C., El daño moral derivado de incumplimiento de contrato, memoria de prueba, Universidad de Chile, 2002, p. 139. Así, en el derecho comparado se ha impuesto a cargo de los laboratorios médicos una obligación de resultado, comprometiendo su responsabilidad por el sólo hecho de entregar un resultado erróneo de un examen simple.98 Así también lo ha resuelto recientemente la Corte Suprema, al condenar a un laboratorio médico a indemnizar a un cliente que contrató sus servicios para efectuarse un test de SIDA y a quien informó erróneamente que su sangre estaba contaminada con el VIH, en circunstancias de que tres años más tarde se comprobó que nunca había sido portador de ese virus.99 La sentencia de instancia había declarado que por tratarse del SIDA, el laboratorio debió extremar los cuidados en la identificación de la muestra, exigiendo incluso gestiones que iban más allá de los deberes legales vigentes a esa fecha; lo que muestra que una prueba de la diligencia resultaba prácticamente imposible. 50 Cf. La Corte Suprema rechazó el recurso de casación en el fondo interpuesto contra la sentencia de la Corte de Apelaciones de Concepción (6 de marzo 2002)122 que condenó al Servicio de Salud Concepción al pago de 65 millones de pesos a la víctima por concepto de daño moral. Los traumatismos torácicos pueden comprometer tanto la vía aérea directamente, como las funciones cardíaca y respiratoria, y, por tanto, implican un riesgo vital para la víctima. 24 Sobre estas discusiones: cf. la jurisprudencia y doctrina francesas son categóricas en este sentido. Sobre este proyecto de ley: cf. Wrongful birth y wrongful life. Así, en ese país, un fallo de principio de 1997 dispuso que todo aquel legal o contractualmente sujeto a una obligación particular de información debe probar su cumplimiento (Première Chambre civile de la Cour de Cassation, 25 febrero 1997, Revue trimestrelle de droit civil, 1997, p. 494, obs. Con la cirugía abierta, el cirujano hace un corte quirúrgico grande para abrir el abdomen. 4. Este perjuicio no puede incluir las cargas particulares que derivan, durante toda la vida del niño, de esta discapacidad. Prestaciones de salud que se realizan para prevenir la enfermedad o diagnosticarla tempranamente. Esta prueba puede ser aportada por todo medio” (actual art. En primer lugar, y aunque sea un tanto banal repetirlo, la medicina evolucionó enormemente en las últimas décadas: la creación de nuevas técnicas de diagnóstico, de prevención y de tratamiento, y la invención de medicamentos, han sofisticado una ciencia que hasta el siglo XIX sostenía que la aplicación de sanguijuelas era recomendable para controlar la presión. sobre esta reforma francesa: Mauricio Tapia, “Décadence et fin éventuelle du principe d’identité des fautes pénale et civile”, en Gazette du Palais, 7-8 marzo 2003, p. 2 et s.; y, Claudine ESPER, “Les conséquences de la loi du 10 juillet 2000 sur la responsabilité médicale des acteurs de santé”, en Médicine & Droit, París, Ed. Interruptor de Navegación Sobre este proyecto ley: cf. Existe el riesgo de sangradura y formación de hematomas, o una concentración de sangre en el sitio de la biopsia. Por otra parte, la intervención de clínicas, de hospitales (o incluso mutuales), y de médicos que actúan por cuenta de éstos, provoca también incertidumbres en la calificación de las relaciones que se crean con el paciente víctima del daño. Existen varios casos distintos del mal denominado “perjuicio de nacer”, que tienen en común el ser ocasionados por un diagnóstico o tratamiento médico negligente.152 En primer lugar, existen casos de “nacimientos no deseados”, en que los padres demandan indemnización al médico que efectuó negligentemente la esterilización o la interrupción del embarazo. B. Starck, H. Roland y L. Boyer, op. 80 Cf. Atribución de estos errores. Sin embargo, al menos en el derecho francés, la jurisprudencia es reticente a aceptar el cúmulo, siendo la responsabilidad médica eminentemente contractual (cf. en este sentido: André Tunc, La responsabilité civile, París, Económica, 1989, 2ª ed., p. 40 y s. 33 Cf. Riesgo terapéutico en el derecho nacional. En el derecho nacional, no es un tema que haya preocupado a la doctrina,114 y fuera de los casos de infecciones intrahospitalarias que se examinarán, existen pocos fallos en que se discuta abiertamente la existencia de un accidente médico. comentario de Andrés Jana y Mauricio Tapia, “Daño moral...”, op. Una aplicación reciente: C.S., 30 de abril de 2003, Gaceta Jurídica N° 274, 2003, p. 59 y s. 53 Por ejemplo, en el derecho francés, la ley N ° 2002-303 de 4 de marzo de 2002, sobre los derechos de los enfermos y la calidad del sistema de salud, confirmó la existencia de una responsabilidad sin culpa o estricta por las infecciones intrahospitalarias a cargo de los “establecimientos de salud”, excluyendo, por tanto, a los “profesionales de la salud” que siguen sujetos al régimen general de responsabilidad por culpa: “Los establecimientos, servicios y organismos arriba mencionados son responsables de los daños resultantes de infecciones hospitalarias, salvo si ellos proporcionan la prueba de una causa inimputable” (actual art. 136 Aunque, en este ámbito, la jurisprudencia comparada utiliza frecuentemente (y de forma indebida) la teoría de la pérdida de una oportunidad para ocultar sus incertidumbres acerca de la relación de causalidad y condenar de forma parcial al médico (y no por la muerte o la agravación del paciente).137 Existen resguardos para evitar que la pérdida de una oportunidad extienda la reparación a los límites de la especulación:138 se exige que la oportunidad perdida sea real y seria.139 En esencia, significa que se niega la reparación si existía una baja probabilidad objetiva de obtener el bien en juego (el paciente tenía muy pocas posibilidades de sanar o sobrevivir). Para explicarlas, se han utilizado varias figuras jurídicas: la estipulación en favor de otro (suscrita entre la clínica y el médico, siendo el enfermo el beneficiario);46 la representación (el médico apoderado sería el encargado de contratar al resto de los profesionales y el personal); la agencia oficiosa (el hospital sería agente del paciente); la responsabilidad por culpa directa del hospital o clínica, o por el hecho ajeno. en este sentido: Muriel Fabre- Magnan, De l’obligation d’information..., op.cit., párr. 57 y 76. XV, diciembre 2003, p. 75-111, Responsabilidad civil médica: riesgo terapéutico, perjuicio de nacer y otros problemas actuales *. 125 Première Chambre civile de la Cour de cassation, 29 de junio de 1999, Gazette du Palais, 1999. y manteniéndolo 2 minutos) por el riesgo de deterioro de la mucosa rectal y porque al estimular el recto también estimulas la eliminación de heces con lo cual contribuimos a que el niño solo haga deposiciones cuando lo … Así, en el derecho nacional, en un juicio fallado en el año 2002, se excluyó la responsabilidad de un grupo médico que utilizó un instrumento eléctrico en la cavidad abdominal para sujetar el intestino mientras se completaba una cirugía vaginal, que se activó provocando una peritonitis bacteriana que condujo a la muerte de la paciente, en atención a que en la época en que ocurrieron los hechos esa maniobra quirúrgica era aceptada y normalmente usada en ese tipo de intervenciones. En el segundo caso fallado el 28 de noviembre, un médico no había comunicado a la paciente los resultados de una dosificación de beta HCG, que le había propuesto a las seis semanas de amenorrea, y tales resultados, corroborados por exámenes ecográficos, revelaban la discordancia entre un diámetro parietal importante y un fémur demasiado corto, que eran alarmantes y justificaban una consulta de un especialista en genética y en ecografía. supra N° 4 y nota 16. … ).14, 5. ).113, 29. 110 Tal como sostiene François Chabas: “La réparation des conséquences de l’aléa thérapeutique”, en J.C.P (La Semaine juridique) ed. cit, p. 13 y s., y 369 y s.; y, Geneviève Viney y Patrice Jourdain, Les conditions de la responsabilité, Traité de droit civil, bajo la dirección de Jacques Ghestin, París, L.G.D.J., 1998, p. 440 y s. 60 De la responsabilidad civil en general y de la responsabilidad delictual entre los contratantes, Concepción, Publicaciones de la Universidad de Concepción, 1941, p. 383. p. 23 y s. y 52 y s. En todo caso, dos fallos recientes de la Corte de Apelaciones de Concepción se refieren a la posibilidad de la opción en materia médica, citando este artículo de Pedro Zelaya: 10 de agosto de 2000 (Gaceta Jurídica N° 259, 2002, p. 38 y s.) y 20 de mayo de 2002 (Gaceta Jurídica N° 268, 2002, p. 93 y s.). La Corte excluyó la responsabilidad (penal y civil) de los médicos, porque el daño se produjo por una razón accidental, considerando que toda operación involucra “peligros”, y porque el empleo de ese instrumento médico era una práctica aceptada y usual a la fecha de la intervención.116. sobre el acercamiento de estos regímenes de responsabilidad en el derecho francés: Geneviève Viney, Introduction à la responsabilité, Traité de droit civil, bajo la dirección de Jacques Ghestin, París, L.G.D.J., 1995, 2ª ed, p. 423 y s. 35 En el derecho francés tal conclusión parece asentada en la jurisprudencia desde la década del 50: cf. Una solución como ésta sólo sería factible bajo algunos supuestos: utilización sistemática de la obligación in solidum entre hospitales y médicos; distribución del riesgo por un seguro de responsabilidad generalizado o, mejor aún, obligatorio; desvinculación de la acción penal y civil, que impida que profesionales competentes sean conducidos a un proceso penal por hechos que no pudieron controlar, y un reequilibrio procesal que evite las dificultades probatorias a las víctimas. Abarca desde una pequeña fisura hasta la rotura total del hueso con desplazamiento de los dos extremos de la fractura del hueso. (A) La responsabilidad contractual del médico, 10. La fatalidad en los actos médicos. Con todo, atendiendo a que los casos de responsabilidad civil médica se resuelven en el derecho nacional preferentemente en sede extracontractual, tal como se indicó,68 estos problemas no se presentan con demasiada frecuencia, siendo generalmente la víctima la que prueba la negligencia del médico. 204. supra N° 4 y nota 16. Pueden consultarse los siguientes casos recientes de responsabilidad civil extracontractual médica resueltos en sede penal: C.S., 2 de julio de 1998, R.D.J, t. XCV, sec. L. 1111- 2 del Código de la salud pública). por François Chabas, p. 484 y s. 25 Arturo Alessandri ya en los años 40 concluía que esta responsabilidad es una responsabilidad de naturaleza contractual, sin duda, siguiendo a la doctrina y a la jurisprudencia francesa que desde el año 1936 había adoptado formalmente esa posición. 98 Cf. Redes asistenciales. Por último, otras causas, más generales, explican también este crecimiento de los casos de responsabilidad médica: el aumento general del espíritu litigioso; la menor tolerancia frente a los riesgos de la vida entre los ciudadanos; o incluso, como sostienen Robert Cooter y Thomas Ulen, la codicia de los abogados que plantean reclamaciones cada vez más absurdas.15, 6. Orlando Tapia, op.cit., p. 384 y s. 67 El proyecto de ley sobre los derechos y deberes de las personas en salud no contribuye demasiado a aclarar estas dudas en materia de responsabilidad civil médica. 147 Algunos estudian la pérdida de una oportunidad como si fuese un tipo de lucro cesante: cf. El error es inherente a la acción humana, y por ello resulta contrario a toda noción de justicia tratarlo como un comportamiento culpable, más aún si se considera la estigmatización que conlleva en el profesional si la víctima, como ocurre en muchos casos, decide ejercer una acción penal.75 Por esto, no se justifica condenar en responsabilidad a un médico por la lesión accidental de un nervio o el corte de una arteria durante una intervención, si se considera que en un porcentaje elevado de operaciones aquello se produce inevitablemente.76 Por lo demás, tal carácter inevitable frustra todo fin de prevención de daños que pretenda atribuirse a la responsabilidad civil, pues escapa al control del responsable impedir tales infortunios, aun usando la diligencia debida. 214; y Hernán Corral T., Lecciones de responsabilidad civil extracontractual, Santiago, Editorial Jurídica de Chile, 2003, p. 273 y s. 32 Cf. cit., esp. 3. Generalidades. 494 y s.; Geneviève Viney y Patrice Jourdain, Les conditions..., op. 4ª, p. 95 y s. Pero en cambio, según la Corte Suprema, si es previsible y evitable para un médico especialista (debiendo responder por su conducta negligente) el “riesgo serio” de que la paciente presente un cuadro de pancreatitis aguda, que la condujo a la muerte, al momento de la extracción de dos cálculos, en atención a que sus antecedentes clínicos indicaban que unos días antes había presentado un rechazo a un intento de intervención similar (C.S., 15 de diciembre de 1997, R.D.J., t.XCIV, secc. En medicina, sin embargo, se identifica por lo general como paciente traumatizado a alguien que ha sufrido heridas serias que ponen en riesgo su vida y que pueden provocar complicaciones secundarias tales como 1 shock, paro respiratorio y muerte.[2]​. Si se deja a cargo del médico, como muchas veces lo hace la jurisprudencia, ¿no se está castigando entonces a un buen profesional por hechos que están fuera de su control? La lex artis. [1] Las hernias más comunes se desarrollan a través de la pared abdominal, a través de orificios naturales o artificiales que constituyen los puntos débiles en los cuales comienza el proceso de formación de la hernia. cit., p. 78 y s. También en el derecho francés (cf. La voluntad de las partes puede conferir a la obligación del médico el alcance de una obligación de resultado. Diario La Tercera, 9 de septiembre de 2003). 62 Cf. supra N° 18. Citando a autores franceses de la primera mitad del siglo XX, que rechazaban o ignoraban esta teoría, Arturo Alessandri sostuvo que la privación de una simple expectativa, de un alea, no es un daño indemnizable por no ser cierto.141 Pero esta opinión, en esa época (1943) estaba lejos de ser unánime (como el mismo autor reconoce)142 y se funda en supuestos equivocados. 45 Cf. infra N° 39). 41 Esta constatación no es novedosa: cf. V, N° 17/20, p. 141 y s.; Leslie Tomasello H., “La responsabilidad civil médica”, en Estudios de derecho privado, Valparaíso, Edeval, 1994, p. 13 y s.; R. Vásquez Ferreira, “La responsabilidad civil de los hospitales y clínicas por la negligencia médico-sanitaria”, en Responsabilidad civil del empresario, Santiago, Cuadernos de Extensión, Universidad de los Andes, 1996, p. 167 y s.; y Pedro Zelaya, “Responsabilidad civil de hospitales y clínicas. La compensación de este último corresponde a la solidaridad nacional... Toda persona discapacitada tiene derecho, cualquiera sea la causa de su deficiencia, a la solidaridad del conjunto de la colectividad nacional”(art. Seguimiento recién nacido de riesgo; Trastorno del desarrollo con discapacidad intelectual; Trastorno del desarrollo con discapacidad motora; Trastornos sensoriales; Trastorno del espectro autista; 3.3.5. Esta misma línea sigue el proyecto de ley nacional sobre los derechos y deberes de las personas en salud, cuyo artículo 5° dispone: “toda persona tiene derecho a recibir un trato digno y respetuoso en todo momento y en cualquier circunstancia durante su atención en salud”. 127 “Los establecimientos, servicios y organismos arriba mencionados son responsables de los daños resultantes de las infecciones hospitalarias, salvo si ellos aportan la prueba de una causa inimputable” (art. IV. Cf. cit., p. 77 y s.; Yvonne Lambert-Faivre, “La loi N° 2002-303 du 4 mars 2002 relative aux droits des malades et à la qualité du système de santé. 4ª, p. 71 y s.; C.A. Asimismo, en el derecho francés en una responsabilidad cercana a la médica, se entiende que un centro de transfusión sanguínea que precisa que la extracción de sangre no presenta ningún riesgo, contrae una obligación de resultado en relación a los donadores.83 Pero, sin lugar a dudas, los médicos son reacios a obligarse a determinados resultados, siendo la naturaleza de la prestación médica la fuente principal de tales obligaciones. Aunque todavía genere algunas discusiones, existe un relativo acuerdo acerca de la naturaleza contractual de la responsabilidad del médico (A), pero la intervención de clínicas y hospitales involucra nuevos problemas de calificación (B). La gran presencia de vasos sanguíneos en la zona hace que estas heridas sean muy sangrantes, y por ello habitualmente en el tratamiento de estas lesiones suele ser prioritaria la detención de la hemorragia. Un ejemplo típico es la imposibilidad de acceder a una profesión cuando la víctima, con estudios avanzados, tenía oportunidades serias de ejercerla.135 En materia médica, especial importancia tiene la pérdida de oportunidades de sanar o de sobrevivir, que justifica la condena del médico que con su falta (no operar a tiempo, no exigir otros exámenes, etc.) infra N° 32. (La Semaine juridique) ed. La pérdida de una oportunidad, esto es, la frustración de una expectativa de obtener una ganancia o de evitar una pérdida, es un perjuicio que se encuentra entre el daño cierto y el daño eventual.134 La hipótesis es de una víctima que tenía oportunidades de obtener un bien aleatorio que estaba en juego (recobrar la salud) y el agente, al cometer el hecho ilícito, destruyó ese potencial de oportunidades (no efectuó un examen). 1547 del Código Civil), pues en una obligación de medios la constatación del incumplimiento exige que la víctima pruebe la negligencia del deudor. François Chabas, Cien años de responsabilidad civil en Francia, op. Los casos de responsabilidad médica en el derecho nacional van en aumento.19 Según cifras del Colegio Médico, en 1995 existían sólo tres denuncias mensuales por negligencia médica, mientras que en el año 2002 esta cifra llegó a 58. Esta información es acompañada de la entrega de un presupuesto detallado” (actual art. Siempre que nos encontremos ante un traumatismo craneal debemos sospechar la posibilidad de una lesión en la columna vertebral. 28 Droit civil. infra N° 11 nota 38). Una corte de apelaciones rechazó la reparación de ese “lucro cesante”, por considerar que se trataba de “meras conjeturas”, faltando antecedentes ciertos sobre su capacidad de trabajo y sus posibles actividades futuras. 20). 2. cit., p. 107 y s. Hernán Corral alude a esta confusión entre la culpa y estos errores que califica de “imprevisibles” en materia médica (op. La ley N ° 2002-303 de 4 de marzo de 2002, sobre los derechos de los enfermos y la calidad del sistema de salud, confirmó esta regla: “En caso de litigio, pertenece al profesional o al establecimiento de salud aportar la prueba que la información ha sido entregada al interesado en las condiciones previstas por el presente artículo. 128 Cf. Corte Suprema, casación fondo, 5 de noviembre de 2001”, Santiago, Universidad Diego Portales, 2003 (en prensas). En términos económicos, una excesiva proliferación de juicios en materia de responsabilidad médica puede desincentivar algunas especialidades, disminuyéndolas por bajo el nivel óptimo social (como ha ocurrido en algunos países con los anestesistas y obstetras); generar un aumento del costo de los servicios (los médicos se ven forzados a adoptar medidas de precaución excesivas, tal como la prescripción de exámenes prescindibles); cuestión que finalmente desencadena un alza de los servicios (y de los seguros, cuyo costo es transferido también al precio de los servicios). Las heridas se pueden clasificar según el agente que las provoca en incisas, punzantes, contusas, con pérdida de sustancia, por desgarro, en colgajo y especiales; y según el factor de gravedad por la profundidad, localización, extensión, sucias y/o con cuerpos extraños en su interior, con hemorragia y las no tratadas. Esta página se editó por última vez el 2 oct 2022 a las 11:45. G 1997, I, 4016. Como se trataba de una paciente privada, y los jueces de instancia no tuvieron por acreditada la existencia de un contrato entre el hospital y la víctima, la causa fue fallada como “responsabilidad extracontractual por culpa del servicio hospitalario” (según los artículos 2314 del Código Civil). de Copiapó, 25 de marzo de 2002 (sentencia firme), Gaceta Jurídica N° 265, 2002, p. 127 y s. 44 Sin duda, influyó en esta práctica la opinión de una parte de la doctrina nacional, que estima que en el juicio penal sólo podía acumularse la acción de responsabilidad civil extracontractual. Esta conclusión es contradicha, con ocasión del reenvío, por la cour d’appel d’Orléans, el 5 de febrero de 1999: “el niño P. no sufrió perjuicios reparables en relación con las faltas cometidas por el laboratorio X. y el doctor Y”. cit., p. 475 y s. 94 Transformándose, en la terminología de la doctrina francesa, en una obligación de medios agravada. En segundo lugar, los fallos citados por el autor para sostener su posición son las típicas hipótesis en que se rechaza la reparación de la pérdida de una oportunidad por existir una probabilidad demasiado baja de obtener la ganancia (como conjeturas sobre una posible vida profesional futura).144 Por último, el error principal es sostener que en estos casos la víctima tiene derecho a demandar la totalidad de la ganancia perdida, pues la reparación de la pérdida de una oportunidad es siempre parcial, corresponde sólo a un porcentaje de la ganancia esperada .145 Con excepción de un lúcido comentario de Ramón Domínguez A.,146 la doctrina nacional moderna no ha contribuido demasiado a disipar las confusiones de la jurisprudencia, que asimila la pérdida de una oportunidad al lucro cesante.147 Esto es un error. 101 Cf. N° 6. Por su parte, se estima que los hospitales del sector público tienen juicios por un monto total de 13 mil millones de pesos por indemnizaciones solicitadas por pacientes (con aproximadamente el 52% de las demandas por negligencia médica). 59 y s.). 1448 y 1679 del Código civil. En la obligación de medios, la prueba del incumplimiento del contrato supone efectuar un juicio de valor acerca de la diligencia empleada por el deudor; en cambio, en la obligación de resultado, el incumplimiento queda demostrado si se prueba simplemente que el resultado no se obtuvo.59 Por ello, sólo en este último caso es plenamente aplicable la presunción de culpa en materia contractual (art. Se hacen bajo anestesia local, lo que disminuye aún más el escaso riesgo que conllevan las técnicas quirúrgicas mayores. Los problemas se presentan cuando el médico omite informar negligentemente a los padres durante el embarazo una discapacidad congénita que afecta al feto. Generalidades. 126 Première Chambre civile de la Cour de cassation, 13 de febrero de 2001, Gazette du Palais, 21-23 abril 2002, p. 2, nota François Chabas. Generalizando, puede sostenerse que el médico debe entregar una información inteligible, apropiada y completa.86 En primer lugar, para ser inteligible la información médica puede (o debe) ser aproximativa, a condición de que sea leal, y así por ejemplo se ha juzgado en el derecho comparado que un cirujano satisface esta obligación si habla de “sinusitis” al paciente cuando la afección verdadera era una “mucositis frontal”. Este perjuicio, denominado en la práctica anglosajona wrongful life, y que alcanzaría todos los sufrimientos, la privación de agrados y placeres, y los gastos de llevar una vida discapacitada es simplemente inconmensurable y, en general, su reparación tiende a ser limitada (o rechazada) en el derecho comparado. Como se expone, sólo el primero de éstos se ha planteado indirectamente en la jurisprudencia nacional. En las lesiones traumáticas de las extremidades podemos encontrar: Separación momentánea de las superficies articulares que produce un estiramiento de los ligamentos (a veces ruptura) generalmente después de efectuar un movimiento forzado (torcedura) de la articulación en un sentido determinado. cit., p. 114 y s. 79 El error de conducta, aunque inevitable, no es causa inimputable por provenir del propio médico y ser normalmente previsible. 21 El proyecto de ley sobre los derechos y deberes de las personas en salud insiste en estas “vías administrativas” para la resolución de los problemas de negligencia médica, de dos formas: a) Creando una especie de reclamo que es conocido y resuelto por el mismo establecimiento de salud implicado (público o privado), pudiendo el paciente recurrir, si la respuesta no es satisfactoria, ante el Director Regional de Salud competente (art. [37] Uno de los primeros cambios que se muestran en un corazón infartado es … 76 Estos casos (nervio lesionado y arteria cortada) son citados de la jurisprudencia francesa por François Chabas en el comentario: “La maladresse constitue une faute”, en Droit et patrimoine, octubre 2000, p. 99. 1546 del Código Civil) o como una obligación precontractual que persigue ilustrar el consentimiento antes de la intervención médica.84 En el derecho comparado la obligación de información médica ha tendido a abandonar los códigos de deontología profesional para transformarse en un derecho del paciente.85¿Pero qué debe informar el médico? Estadísticamente estos riesgos terapéuticos son en cierta medida previsibles: ocurren, desgraciadamente, a un determinado número de pacientes cada año; pero, en el estado actual de la ciencia médica, parecen simplemente inevitables. En el derecho comparado, estos riesgos han instado a que sobre la base del denominado principio de precaución se obligue a quienes están en el origen de su producción (como los centros de transfusión sanguínea o los laboratorios) a tomar todas las medidas adecuadas para prevenirlos y a responder de los daños si se realizan.17, 7. 7 En el derecho francés, una ley del año 2000 intentó frenar el fenómeno de excesiva penalización de ciertas actividades (entre ellas, la profesión médica), incentivando a las víctimas a entablar la acción directamente frente al juez civil. 71, (B) El error de conducta y la deformación de la culpa médica, 18. 1ª, p.157 y s. 70 2 de julio de 1998, R.D.J., t. XCV, sec. Cf. WebEl examen histopatológico del corazón puede mostrar un infarto, por lo general durante una autopsia.Bajo el microscopio, un infarto de miocardio se presenta como una región circunscrita por isquemia y necrosis coagulativa, identificables en las primeras 12 horas del incidente. Todas las citas efectuadas en este artículo se refieren al último proyecto contenido en esta indicación sustitutiva, que actualmente se encuentra en el primer trámite constitucional en la Cámara de Diputados. La acreditación de la URAC es un comité auditor independiente para verificar que A.D.A.M. 22. II. 123 Ibídem, cons. Revista de Derecho, Vol. en este sentido: Felipe de la Fuente H., “La acumulabilidad de la acción civil en el proceso penal”, en Derecho de Daños, Santiago, Lexis Nexis, 2002, p. 111 y s. 9 Por esto, usualmente en esta relación contractual es el hospital o la clínica quien determina las condiciones de contratación, no quedando al paciente otra opción que aceptar o rechazar los cuidados médicos que se proponen y que serán prestados por profesionales que en muchas ocasiones desconoce. El riesgo, sin embargo, se presenta en menos del 1 por ciento de las pacientes. Esto se hace sin agujas. Aunque frecuentemente no se observan amenazas importantes a la salud ante la ocurrencia de un neumotórax espontáneo primario, se han notificado algunos casos de … 47 Existe una memoria de prueba, publicada posteriormente como libro, que trata de la responsabilidad del Estado por la actuación de los servicios de Salud, y que tiene una posición, absolutamente cuestionable, proclive a la responsabilidad objetiva en esta área: Andrés Vásquez, Responsabilidad del Estado por sus Servicios de Salud, Santiago, Editorial Jurídica Conosur, 1999. Cf. Si consulta a su médico de atención primaria para su chequeo antes de la cirugía, asegúrese de que el hospital o el cirujano reciban los informes de esta visita. p. 339 y s.; H., L. y J. Mazeaud y F. Chabas, Leçons..., op. Les persones, París, Cujas, 1995, párr. 5° inc. 1 (trato digno); 5° letras c y d (privacidad); 11 y s. (confidencialidad de la “ficha clínica”); 3° (no discriminación), y 7° y s. (acceso a la información). supra N° 4 y nota 16. cit., p. 17 y s. (antes de la reforma de la ley de 2002); y Angelo CASTELLETTA, op. Una asepsia perfecta parece imposible de lograr en el estado actual de la actividad médica; por ello pareciera que estas infecciones, en gran medida inevitables, aproximan a la responsabilidad a los límites de la fuerza mayor. 1857 y s. del Código Civil), se hace garante al médico por la normalidad (ausencia de vicios) de los materiales y productos empleados, sujetándolo a una obligación de seguridad de resultado a su respecto.95 Evidentemente, si los materiales y productos se encuentran en un estado de experimentación, conociendo y aceptando el paciente su utilización, el médico sólo será obligado al deber general de prudencia y diligencia en su instalación o administración. Algunos elementos comunes pueden extraerse de las innumerables definiciones: a) es un daño causado a la integridad física o psíquica del paciente; b) es un perjuicio ocurrido con ocasión de la ejecución de una prestación médica (una operación, un tratamiento, etc. Jurisprudencia y doctrina nacional. En el ámbito médico, al obligarse a sanar al paciente, evidentemente, el profesional también se compromete a velar por su seguridad, siendo procedente la reparación de los perjuicios extrapatrimoniales que derivan del incumplimiento de esta obligación.38, Esta evolución, unida a una mayor tolerancia frente a la opción o cúmulo de responsabilidad, puede transformar en académica esta discusión acerca de la naturaleza de la responsabilidad civil médica.39, 12. El titular de la ficha clínica tendrá, según este proyecto, libre acceso a ella y puede solicitar una copia; los terceros (como los tribunales) podrán tener acceso en determinadas circunstancias manteniendo su “confidencialidad”. Sin embargo, el examen es el mismo. Usualmente, en el acto médico se utilizan materiales (bisturí, mesa de operación, prótesis, etc.) Este sistema de apreciación del daño es más equitativo que lógico: o la ventaja se hubiese producido y la víctima entonces no habrá recibido suficiente, o bien la ventaja no se hubiese realizado y la víctima en tal caso habrá recibido demasiado. 1ª, p. 234 y s.), y otro en que fue amputada una pierna del paciente producto de una infección contraída en el hospital (C.A. El caso fue fallado por la Assemblée Plénière de la Cour de cassation, el 17 de noviembre de 2000.157 Una mujer embarazada presentaba síntomas de rubéola (la que afectaba también a uno de sus hijos), y comunica su voluntad, y la de su marido, de interrumpir el embarazo en caso de confirmarse esa enfermedad (en embarazadas provoca un alto riesgo de infección y de malformación del feto). (iii) Obligación de resultado por exámenes y análisis simples. Cf. Cf. en este sentido: H., L. y J. Mazeaud y F. Chabas, Leçons..., op. Sobre esta relación contractual por adhesión en contratos con laboratorios médicos: Andrés Jana y Mauricio Tapia, “Daño moral causado por un diagnóstico errado de SIDA: Responsabilidad contractual del Laboratorio. 1ª, p. 234 y s., y Gaceta Jurídica Nº 257, 2001, p. 39 y s. Cf. François Chabas, Cien años de responsabilidad civil en Francia, op. cit., p. 39 y s. 36 En el derecho nacional, la ley N° 19.496 sobre protección de los derechos de los consumidores, aplicable a los contratos de prestación de servicios, considera cláusulas abusivas en tales contratos: las que atribuyen al consumidor el efecto de deficiencias, omisiones o errores administrativos inimputables (art. Desgraciadamente no hay soluciones unívocas en el derecho comparado.78 Sin embargo, generalizando (simplificando) puede sostenerse que: por una parte, razones de seguridad sanitaria, consideradas prioritarias por la sociedad, justifican que, excepcionalmente, ciertos resultados deban ser garantizados al paciente, no aceptándose la excusa del error o de la diligencia por parte del médico (obligaciones de resultado médicas); y, por otra parte, algunos accidentes médicos graves, en cuyo origen pudo haber estado o no una inadvertencia médica inevitable, deben quedar fuera del ámbito de las obligaciones del médico, sujetos a un sistema de socialización del riesgo (riesgo terapéutico). por otra parte: C.S., 28 de septiembre de 1998: que afirma que la responsabilidad médica exige la infracción de la “lex artis” y que debe ser acreditada en el juicio (R.D.J., t. XCV, sec. WebDespués de radioterapia para cáncer, usted debe someterse a un examen regular por su radioncólogo para detectar cánceres recurrentes y nuevos. Así también en Chile, el proyecto de ley sobre los derechos y deberes de las personas en salud, contempla el derecho a la información (arts. cit., p. 278). NO cambie ni deje de tomar ningún medicamento sin antes consultar con su proveedor de atención médica. J. Sainte-Rose y nota François Chabas). G 2000, II, 10438, rapport P. Sargos, concl. supra n°4 y nota 16. Como se trata de sucesos eventuales, escapan al dominio o control del médico y, por ello, un accidente médico puede producirse con ocasión de un error inevitable de conducta de éste.102 La intervención del azar en la realización de estos accidentes se demuestra porque generalmente sus efectos se presentan como anormales, esto es, no dicen relación con el estado anterior del paciente o su evolución previsible, y son diversos a aquellos que habría provocado el simple fracaso del tratamiento.103 Por esto, François Chabas ha concluido que el riesgo terapéutico es simplemente un accidente debido no al comportamiento culpable del médico sino a la fatalidad. 8). 134 Su reparación es admitida ampliamente por la doctrina y jurisprudencia francesa. De esos casos, 258 corresponden a situaciones que llevaron a la muerte del paciente.21, En una sociedad que tiene graves inconvenientes para asegurar un servicio de salud mínimo a la población, resulta entendible que la discusión acerca de la calidad de ese servicio mínimo esté un poco relegada (el Plan Auge es una muestra de este fenómeno). G. 1997, I, 4025. Sobre este proyecto de ley: cf. (vi) La negligencia médica en Chile. II. Directa o indirectamente, cerca del 30% de los casos de negligencia médica estarían vinculados a la mala administración de la anestesia.20, Pero estas cifras son engañosas, pues existe un gran número de negligencias médicas que por ocurrir en establecimientos públicos sólo se investigan y se sancionan mediante sumarios administrativos. Una visión comparatista”, en Revista de Derecho, Universidad de Concepción, Nº 188 (1990), p. 126; y Carmen Domínguez H., El daño moral, Santiago, Editorial Jurídica de Chile, 2000. 4ª, p. 95 y s.). En Francia, con 58 millones de habitantes y aceptando el aborto desde 1975, existe en la actualidad un promedio de 250 mil abortos por año (cantidad que entre los países de la Unión Europea se estima elevada). Según esta clasificación, la obligación de cuidados a que se compromete el médico es una obligación de medios, como concluyó tempranamente en el derecho nacional Orlando Tapia S. (1941): “por regla general, el médico no se obligará a otra cosa que a emplear en el cuidado del enfermo la prudencia y diligencia necesarias... no se compromete, en manera alguna, a sanar al enfermo, sino solamente a desplegar todos los cuidados y precauciones que las reglas propias de su profesión requieran...”, así, “si el enfermo pretende que el médico no ha empleado la diligencia y prudencia debidas en su atención, deberá ser él quien pruebe esta circunstancia”.60 Por ello, para determinar si el médico ha incumplido su obligación y actuado negligentemente será necesario que el paciente acredite que el comportamiento efectivo del médico se alejó no de la conducta de un “buen padre de familia” cualquiera, sino de aquella que podía esperarse de un profesional competente y diligente (culpa leve; art. En primer lugar, para Arturo Alessandri en estos casos no habría una “certeza” de obtener la ventaja;143 pero evidentemente si tal certeza existiese correspondería no sólo reparar la pérdida de una oportunidad, sino la integridad del daño. Cf. infra nota 16. 159 La bibliografía es extensa. L. 1142-1.I del Código de salud pública). Se pueden imaginar tres soluciones para atribuir el peso de estos accidentes. cit., párr. Se considera una herida la pérdida de continuidad de la piel o de las mucosas como consecuencia de un traumatismo, provocando la comunicación del interior del cuerpo con el exterior.. Las heridas se pueden clasificar según el agente que las provoca en incisas, punzantes, contusas, con pérdida de sustancia, por … J. Sainte-Rose, nota François Chabas; Laurent Aynès, “Préjudice de l’enfant né handicapé: la plainte de Job devant la Cour de cassation”, en Dalloz 2001, chr., p. 492; C. Labrusse-Riou y B. Mathieu, “La vie humaine peut-elle être un préjudice”, en Dalloz 2000, N° 44, p. III; Alain Sériaux, “Perruche et autres. WebSe realizan en tejidos superficiales, fundamentalmente sobre la piel (epidermis, dermis y tejido celular subcutáneo) y faneras (pelo y uñas). 29 Georges Ripert sostenía que quien da su adhesión sin discutir está decidido ante todo a contratar. Pero en ¿qué consiste el riesgo terapéutico? cit. J.C.P. 34. 10018. La obligación principal del médico es de medios. cit., p. 77 y s. (después de la reforma de la ley de 2002). WebAl tener en cuenta todos los elementos anteriores, se decidió llevar la paciente al quirófano, para tratamiento de tipo quirúrgico. 9. Se limpia uretra. 157 J.C.P. Cf. Las principales especialidades afectadas son la ginecología (20%) y la cirugía general (12%). Extensión de los perjuicios reparables. 72 Jean Penneau, Faute et erreur en matière de responsabilité médicale, Paris, L.G.D.J., 1973, párr. sobre la procedencia de la reparación del daño moral previsible en algunos contratos (como el médico): Andrés Jana y Mauricio Tapia, “Daño moral ...”, op.cit. cit., párr. 170 Cf. Geneviève Viney y Patrice Jourdain, “L’indemnisation des accidents médicaux: que peut faire la Cour de cassation?”, en J.C.P (La Semaine juridique) ed. Op. Sostener lo contrario implicaría autorizar una excusa general del deudor cada vez que el incumplimiento se deba a la negligencia de un tercero en quien delega la ejecución del contrato. La prioridad que las sociedades contemporáneas atribuyen a la obtención de la “seguridad sanitaria”, que permita prevenir algunos riesgos a los pacientes y que asegure la reparación de los daños si se realizan, ha llevado a que se grave excepcionalmente a los médicos, pero sobre todo a los establecimientos de salud, con algunas obligaciones de seguridad de resultado que no aceptan la excusa ni de la diligencia ni del error de conducta. 51 En materia de responsabilidad del Estado, la jurisprudencia también acepta que un comportamiento anónimo sea calificado como falta de servicio. 136 Sin embargo, cuando un médico omite informar a la víctima sobre los riesgos graves de una operación no puede repararse la pérdida de una oportunidad de sobrevivir o sanar, pues las oportunidades son una cuestión objetiva, que debe depender del azar y no de la voluntad de una persona (en este caso de la víctima, que debidamente informada sobre los riesgos habría decidido, probablemente, no someterse a un tratamiento). cit., p. 10. Pedro Zelaya, op.cit. Los diagnósticos y exámenes médicos están sujetos a la interpretación que debe hacer el profesional acerca de su alcance y posibles efectos, y en esto se someten a la regla general de la obligación de medios. Fransçois CHABAS. por ejemplo: José Luis Diez, El daño extracontractual. Responsabilité délictuelle, París, Editions Cujas, 2001/2002, 11ª ed., p. 139 ; H., L. y J. Mazeaud y F. Chabas, op. 107 Ley N ° 2002-303 de 4 de marzo de 2002, sobre los derechos de los enfermos y la calidad del sistema de salud. cit., pp. 11. 4ª , p. 192 y s.). (La Semaine juridique) ed. 57 Estos párrafos se refieren esencialmente a la responsabilidad del médico, persona natural. 83 Cf. François Chabas, Cien años de responsabilidad civil en Francia, op.cit., párr. Sobre la responsabilidad médica en esta ley: Patrice Jourdain, “La réforme de l’indemnisation des dommages médicaux et la place de la responsabilité médicale”, en Le nouveau droit des malades, París, Litec, 2002, p. 8” y s.; Christophe Radé, “La réforme de la responsabilité médicale après la loi du 4 mars 2002 relative aux droits des malades et à la qualité du système de santé”, en Responsabilité civile et assurances, mayo 2002, chr., p. 4 y s.; Mauricio Tapia, “Responsabilidad médica en Francia (Principales modificaciones introducidas por la ley de 4 de marzo de 2002)”, Paris, junio 2003 (inédito). en la jurisprudencia reciente: C.A. 15 Derecho y economía, México, Fondo de Cultura Económica, 1998, 1ª ed. Como la misma Corte Suprema lo reconoce en una sentencia, la carencia de medios y de personal calificado en la medicina nacional es simplemente intimidante. sobre estas cuestiones: Mauricio Tapia y José Miguel Valdivia, Contrato..., op.cit., p. 23 y s. En el derecho nacional, el proyecto de ley sobre los derechos y deberes de las personas en salud reconoce el derecho de los pacientes a decidir, sobre la base de la información que deben proporcionar los profesionales, si se someten o no a los tratamientos propuestos, debiendo constar por escrito la voluntad cuando esté implicado un riesgo grave para la salud del paciente. la breve, pero interesante, exposición que efectúa sobre estas cuestiones el profesor de derecho y doctor en medicina Jean Penneau, La responsabilité du médecin, París, Dalloz Connaissance du droit, 2a ed., 1996. (La Semaine juridique) ed. Op. Cf. Esa resistencia provocó la intervención del legislador mediante la ley N° 2002-303, de 4 de marzo de 2002, que dispone: “Nadie se puede prevaler de un perjuicio del solo hecho de su nacimiento”.171 La ley priva al niño de la indemnización por una discapacidad no revelada durante el embarazo, y obliga a los padres a probar una culpa caracterizada para demandar la reparación, excluyendo en todo caso de la indemnización las cargas particulares que derivan de esa incapacidad para toda la vida del niño (éstas quedan a cargo de un fondo público).172 Esta ley ha sido duramente criticada por la doctrina, por su carácter demagógico y su redacción defectuosa. 131 “L’évolution de la responsabilité civile d’une dette de responsabilité à une créance d’indemnisation”, en Revue trimestrelle de droit civil, 1987, p. 1 y s. 132 En efecto, sólo en la última década ha resurgido el interés de la doctrina nacional por el daño como elemento de la responsabilidad. Cf. Pero existen exámenes o análisis de laboratorio que no presentan ningún elemento aleatorio, que no necesitan interpretación y sobre los cuales el paciente puede esperar legítimamente un resultado exento de errores (ej. Se aplica un anestésico a la piel que recubre el interior de la uretra. Por el contrario, en una obligación de resultado el deudor asegura la obtención de un objeto determinado, la obtención de un resultado concreto (la entrega material de una cosa, por ejemplo). II. 10 Por ello, y dejado atrás el paternalismo, o esa visión decimonónica en que el paciente debía al médico un respeto reverencial fundado en una especie de mágico conocimiento de la lex artis, el creciente acceso a la información acerca de su estado conduce a las víctimas a no vacilar en accionar contra los médicos,11 produciéndose una especie de “emancipación cívica del paciente”.12, Una prueba de este fenómeno es que los deberes de prudencia profesionales han abandonado paulatinamente los códigos de deontología en el derecho moderno, y se han transformado en derechos del paciente, cuyo cumplimiento puede ser exigido frente a los tribunales: por ejemplo, a ser tratado con dignidad, a la confidencialidad de su expediente, a la no discriminación en el acceso a la salud, etc.13 Esta idea ha inspirado en Chile el proyecto de ley sobre los derechos y deberes de las personas en salud, que recoge varios de esos derechos de los pacientes (trato digno, privacidad, confidencialidad, no discriminación, acceso a la información, etc. La Corte Suprema rechazó el argumento del tribunal de alzada de que la responsabilidad del Estado por falta de servicio es una responsabilidad objetiva, señalando que la demandante logró probar la existencia de esa falta y que ella fue la causa de los perjuicios sufridos. Finalmente, se analizarán dos fallos recientes de la Corte Suprema que se refieren a un tipo particular de accidente médico: las infecciones intrahospitalarias (C). 74 En el derecho nacional, para un análisis de la deformación de la culpa por su confusión con el error de conducta: Ramón Domínguez A., “Aspectos contemporáneos...”, op. Basil Markesinis, op. Información generada por el Instituto y otras dependencias del gobierno nacional. Así por ejemplo, la Corte Suprema, el año 1998, declaró en sede extracontractual la existencia de una obligación de medios por culpa probada del médico, al concluir que no resulta establecida la negligencia: si no se acredita que una agravación del estado inicial del paciente se debía a la deficiente atención médica recibida,69 o si no se probó que la anestesia haya sido mal administrada.70 La prueba de la negligencia, efectuada por la víctima, resulta entonces indispensable para la constatación de un incumplimiento de la lex artis en los tratamientos que brindó el médico. 91 En Chile, el proyecto de ley sobre los derechos y deberes de las personas en salud, contempla estas excepciones a la obligación de información del médico: “emergencia o urgencia” (art. Vea las opciones de tratamiento para la erisipela. En este último caso, la jurisprudencia nacional, para hacer aprovechar a la víctima de la responsabilidad por el hecho ajeno, ha aceptado la noción de culpa difusa, según la cual la negligencia se atribuye a la organización empresarial en su conjunto, sin necesidad de identificar el autor concreto del daño.51 Como afirma Enrique Barros, esta culpa difusa no es más que un recurso retórico para dar por establecida la responsabilidad por el hecho propio de la organización empresarial. Cf. 23. Obligaciones de resultado convencionales. Asimismo, podrá influir en ello la conciencia de que en actividades vinculadas a la medicina, una misma ignorancia o torpeza puede generar una catástrofe en cadena y afectar a un vasto número de personas, como ha ocurrido en algunos países con los escándalos del contagio del SIDA por sangre contaminada o con los efectos nefastos de la hormona del crecimiento humano. Aa+ Aa-. Teléfono: 56 2 28275700 E - mail: agencia@agci.gob.cl en el derecho nacional, justificando la indemnización de la pérdida de una oportunidad en caso de estudiantes muertos en un accidente: Andrés Jana y Carlos Peña, Reparación del daño extracontractual, Edición, jurisprudencia y doctrina, texto preparado con la participación de los ayudantes Claudio Gutiérrez y Francisca Román, Santiago, Universidad de Chile, 2002. (Modernas tendencias jurisprudenciales)”, en Revista de Derecho de la Universidad de Concepción, 1997, N° 201, p. 11 y s.; también en RDJ, t. XCIV, 1997, N° 2, p. 47 y s. Además, algunas obras generales de responsabilidad civil tratan la responsabilidad médica: Arturo Alessandri, op. Sobre este proyecto de ley: cf. Pero los efectos desastrosos que tienen estos accidentes en las víctimas hacen insostenible esta solución. A.D.A.M. 96 Cf. 140, 36. ), «Lesiones y heridas traumáticas | Irvine Injury Lawyers», https://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Traumatismo&oldid=146323710, Wikipedia:Artículos con enlaces externos rotos, Wikipedia:Artículos con identificadores GND, Wikipedia:Artículos con identificadores LCCN, Wikipedia:Control de autoridades con 14 elementos, Licencia Creative Commons Atribución Compartir Igual 3.0. Cf. Esta clasificación de las obligaciones paulatinamente ha ido siendo aceptada en el derecho nacional. Red de prestadores AUGE/GES a lo largo del país ¿Cómo acceder al AUGE? supra N° 4 y nota 16. sobre esta discusión: Eduardo Court, op. 163 Cf. Para los padres (al menos para los que no deciden abandonar al niño al nacimiento), la discapacidad con que nacerá su hijo es fuente, innegablemente, de sufrimientos (angustia de ver crecer a su hijo afectado de la invalidez, preocupación acerca de su destino una vez fallecidos, etc.) Obligations. cit. Múltiples soluciones. cit., p. 60 y s). Patrice Jourdain). en este sentido: Christian Larroumet, “L’indemnisation de l’aléa thérapeutique”, en Dalloz 1999, chr., p. 33. 173 En efecto, si la Cour de cassation siguiera la letra de este texto (sin considerar la intención del legislador), podría continuar con la jurisprudencia inaugurada por el caso Perruche: que indemnizó no el “hecho del nacimiento” sino el “hecho del nacimiento con discapacidad”.174, Queda, finalmente, la pregunta de si al consagrar progresivamente un “derecho al aborto”, instando a los médicos a otorgar una información oportuna y adecuada acerca de cualquiera malformación que pueda presentar el feto durante el embarazo, se provoque una especie de “normalización” de los nacimientos: se trata de la discusión acerca de la procedencia de la eugenesia (y con ella, de la eutanasia).175. Evidentemente, el médico queda eximido de esta obligación de información en caso de urgencia, imposibilidad de comunicarla (paciente inconsciente) o de rechazo a ser informado91 . WebEste examen se realiza generalmente cuando el paciente tiene dolor de huesos o cuando otras pruebas indican que el linfoma ha viajado hasta los huesos. C.A. Por su parte, en Chile, el proyecto de ley sobre los derechos y deberes de las personas en salud dispone que el paciente tiene derecho a ser informado: “acerca del estado de su salud, posible diagnóstico de su enfermedad, las alternativas de tratamiento disponibles para su recuperación y los riesgos que ello pueda representar, así como el pronóstico esperado y el proceso previsible postoperatorio...” (art. 175 En tal sentido, el análisis de Muriel Fabre-Magnan, “Avortement et responsabilité médicale”, en Revue trimestrelle de droit civil, 2001, p. 285 y s. Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons. Naturaleza de las obligaciones del médico. Así, más que un “perjuicio de nacer” se trata de un “perjuicio de nacer discapacitado”. Razonando en términos de lucro cesante, como hace la jurisprudencia nacional, se termina inevitablemente por negar a la víctima toda reparación.148, (B) El perjuicio de nacer (discapacitado). En Francia, un fallo de principio resolvió que el médico no está dispensado de informar por el solo hecho de que los riesgos se realicen “excepcionalmente”;89 pero cabe la pregunta de si, al obligar a los médicos a señalar todos los riegos graves, aunque sean excepcionales, se aterroriza inútilmente a los paciente, incentivando las “medicinas paralelas”90. Una seria amenaza a este objetivo significa la frecuencia cada vez mayor de niños, adolescentes afectados que llega a constituir un problema estomatológico común que siempre debe ser considerado como una situación de urgencia a diagnosticar y tratar de inmediato, de forma rápida y certera por el odontólogo.[3]​. En un fallo, esta Corte implícitamente acepta que esa carencia puede justificar que alumnos de medicina cumplan las funciones de anestesista (C.S., 2 de julio de 1998, R.D.J., t. XCV, sec. Soluciones posibles. Jean Penneau, La responsabilité du médecin, op. 20 Según el presidente de la Sociedad Chilena de Anestesiología, Mario Concha, en algunos hospitales es recurrente la práctica de la anestesiología por parte de personal no especializado, como asistentes de enfermería o incluso camilleros, y ello explicaría el alto porcentaje de negligencias cometidas en ese ámbito (cf. 34. Como sostiene Jean Carbonnier, tal como hacia mediados del siglo XX la preocupación principal del derecho de la responsabilidad era la seguridad en materia de accidentes de la circulación (cuestión que está lejos de lograrse), el paso hacia el siglo XXI parece estar dominado por la búsqueda de una seguridad sanitaria absoluta, testimonio del interés que nuestra época presta a la vida y a la salud.1 Este artículo pretende revisar algunos de los problemas típicos que enfrenta esta responsabilidad en la actualidad, aludiendo especialmente a lo resuelto en el derecho francés, así como a la doctrina y a la jurisprudencia nacional de la última década.2 Antes, a modo de introducción, se examinan brevemente las transformaciones modernas de la actividad médica. 23 En todo caso, la clásica afirmación de Plinio de que los médicos son los únicos que pueden matar impunemente parece no ser tan exacta desde un punto de vista histórico. 87 En Chile, el proyecto de ley sobre los derechos y deberes de las personas en salud dispone que la información que se le proporcione al paciente debe ser “comprensible” (art. François Chabas, “L’obligation médicale d’information en danger”, en J.C.P. Recientemente, en Diario El Mercurio: “Muerte intrauterina en Rancagua: Madre culpa a hospital de negligencia médica” (9 de octubre de 2003). Cuando se usan técnicas tales como la SBRT, el objetivo es maximizar las capacidades de la radioterapia para destruir el cáncer, mientras se reducen al mínimo sus efectos en los tejidos y órganos sanos, para … Según el Ministerio de Salud, entre el año 2000 y 2001 se denunciaron 594 casos por presunta negligencia médica, de los cuales un 47% fue sobreseído y sólo un 9% ha concluido con sanciones (desde amonestación escrita hasta expulsión del servicio). 130 Cf. Evidentemente, y desde fines del siglo XIX, se puede considerar superada la discusión acerca de si es posible hacer responsables a los médicos, que supuestamente serían los únicos conocedores de la lex artis.23 De la misma forma, resulta en la actualidad indiscutible que los médicos responden de toda culpa y no solamente de la culpa grave, como alguna doctrina había sostenido en la primera mitad del siglo XX.24 Pero existen varios problemas actuales en torno a esta responsabilidad, de los cuales se examinarán cuatro, que parecen particularmente relevantes: I. Calificación de la responsabilidad médica; II. B. Starck, H. Roland y L. Boyer, op. WebSitio de Secretaría de Salud. 39. Como consecuencia de la aplicación de una fuerza sobre el esqueleto, de forma directa o indirecta, se puede producir una lesión en los sistemas óseo-articular o en el muscular. WebTratamiento periodontal quirúrgico: conceptos y consideraciones. WebLa Escala de Alvarado incluyó a 43 (86 %) pacientes con diagnóstico clínico de la apendicitis aguda, entre grupos de riesgo intermedio y grupos de alto riesgo de los 50 enfermos sospechosos de apendicitis aguda y operados en nuestro hospital que posteriormente se confirmó por estudios histopatológicos. Cf. Un ser humano, aunque limitado y enfermo, es siempre una persona que incrementa la bondad y la belleza del mundo”.167 Sin embargo, como tan acertadamente lo expusiera Basil Markesinis, el debate filosófico acerca de la vida y de la muerte carece históricamente de respuestas unívocas, y en todo caso ninguna jurisdicción puede darles una solución definitiva bajo el prisma de un proceso. hizo perder a la víctima chances de recuperación. 1ª, p.157 y s.). Constituye verdaderamente una obligación de resultado aquella de transmitir materialmente la información, de ponerla a disposición del paciente, especialmente cuando se trata de comunicar resultados de exámenes médicos.93 Sin embargo, en atención a que el profesional es el mejor capacitado para acreditar la entrega de la información, así como su pertinencia y suficiencia, se tiende a invertir el peso de la prueba en su contra.94, 24.

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